Resonancias desde el Trabajo Social
Con el interés de agradecer su apertura a todas aquellas personas a las que he tenido la oportunidad de conocer y acompañar a lo largo de mi trayectoria profesional. GRACIAS.
Rocío Blancas Avilés
"AFORTUNADO AQUEL QUE ELIGE UNA PROFESIÓN QUE COINCIDE CON SU VOCACIÓN"
Vengo de una conferencia sobre motivación y superación dirigida a personas con capacidades distintas, inadecuadamente denominadas discapacitadas, y vuelvo con la firme decisión de reorganizar mis proyectos futuros.
Para ello, hoy comienzo a darle forma a un proceso de revisión continua de mi profesión y mi vocación: el Trabajo Social, con la pretensión de ser de utilidad y aportar mi granito de arena al progreso de mi disciplina.
Sin duda la terapia gestalt, en la que he tenido la oportunidad de formarme durante algunos años, impregna los contenidos que aquí se vierten. Y es que mi proceso de crecimiento personal está muy relacionado con la evolución de mi praxis profesional y ambos crecimientos (personal y profesional) no dejan de influenciarse y nutrirse mutuamente, así como modificarse, como no puede ser de otra manera.
He decidido denominar este blog "Resonancias desde el Trabajo Social", refiriéndome al eco y a la vibración que me profesión me causa y, el mismo, nace de la necesidad de ordenar mis ideas y de un sueño de "volar alto", en el sentido de alcanzar la amplitud de miras necesaria que me permita sumergirme en diferentes realidades cuando lo precise. Como no, a este sueño le ha sucedido una serie de dudas: ¿Volar alto en qué dirección? ¿Cuál es la meta que representa la cima? ¿Y si siempre hay un punto más alto para sobrevolar? Y un bucle de preguntas y respuestas encadenadas, vacías de contenido y de toda lógica porque resulta que, sin darme cuenta, lo que estaba viviendo entonces, ya suponía volar alto y me hacía feliz, y aprendí que para ello tan solo tenía que abrir los ojos... Y entonces sonreí desde la altura.
Sin duda, el Trabajo Social es lo mejor que me ha regalado la vida (después de Leo). Y poder ejercerlo con perspectiva (o sin perderla) era el objetivo de muchos años atrás. En este tiempo, he tenido la oportunidad de acompañar a PERSONAS de diferentes orígenes, culturas, religiones, etnias, ideologías, capacidades, clases sociales... Algunas afectadas gravemente por problemas sociales, otras asustadas ante las dificultades que a todos, en un momento u otro, nos impone la vida para que crezcamos... Personas maestras que han aportado a mi camino humanidad, cuestionamientos, humildad, crecimiento personal y profesional y como no, la certeza de que "detrás de cada persona debe haber un Trabajador Social"(1).
Sobre la resonancia de mi experiencia en el Trabajo Social versará mi blog, introduciendo distintos enfoques de intervención, políticas sociales, vertientes de la acción social, ideas (algunas quizá innovadoras, otras seguramente superadas) y de esta forma conjugar el trinomio inseparable mente-emoción-acción en un marco teórico-vivencial.
Desde mi empeño en la continua re-visión deseo aportar algo a vuestro día a día e ir encajando junto a vosotros, esas piezas de un puzle llamado Trabajo Social que, en ocasiones, parece estar incompleto.
Sin más, quiero agradecer tu visita y me despido y te deseo que "sea lo que sea que decidas hacer, asegúrate de que te haga feliz".(2)
Un afectuoso saludo,
Rocío Blancas Avilés
(1) Palabras de mi admirada Ana Hernández.
(2) Creo que esta frase es de Paulo Coelho...